La Juez Sexta Penal Municipal con control de garantías decidió en la tarde de este martes suspender la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento y mañana a las 2 de la tarde dará a conocer la decisión si envía o no a Gimy José Chapm Peñaloza a la cárcel, quien en audiencia de imputación no aceptó el cargo de feminicidio agravado en la que resultó como víctima la pequeña María José Ortega Ballesta, de 6 años.

El Fiscal 25 Seccional, Adolfo Niebles, solicitó detención preventiva en centro carcelario y argumentó su petición indicando que el sobrino (de 16 años) de Gimy, bajo gravedad de juramento, lo acusó de ser el autor intelectual y por eso existe una inferencia razonable de autoría.

Además, durante audiencia ante un juez de menores, dijo el fiscal, el sobrino se ractificó que Gimy ordenó la muerte de la niña María José.

Por su parte, durante la intervención del delegado de la Procuraduría, este afirmó que se cumplieron todos los elementos para que la Fiscalía solicitara la medida de aseguramiento.

Sin embargo, dejó en claro que el delito de feminicidio no se da, hasta este momento, porque según el material probatorio del ente acusador el hecho de sangre se dio fue por una deuda y no por el hecho de ser mujer. 

El Procurador señaló que este caso encaja dentro de un delito de homicidio agravado y no de feminicidio.

"Todo es mentira"

Por su parte, Jorge Imitola, abogado de Gimy defendió la tesis de que su cliente no fuera asegurado en centro carcelario basándose que "muchos están diciendo mentiras", en especial, el sobrino de Gimy y el taxista Nelson que llevó al adolescente a la zona enmontada de Caribe Verde.

"Gimy José Chapman es una persona de 45 años. Es chatarrero. Su formación no tiene cabida para lo ilegal y lo torcido. Miremos al sobrino y no aparece el perfil del menor adolescente en la carpeta de la Fiscalía. Es un joven de 17 años que no ha querido seguir estudiando. Todos lo califican como una persona rebelde y violenta que no le hace caso a nadie", dijo el profesional del derecho.

El sobrino fue acogido por Gimy, quien trató de educarlo, dijo el abogado, pero el adolescente nunca le hacía caso.

El abogado Imitola aseguró que el adolescente en una ocasión apuñaló a una vecina para robarle y presentó un documento del Instituto Colombiano del Bienestar Familiar donde indica que el adolescente es peligroso para la sociedad.

"La salud mental de este jovencito está distorsionada. Este presenta transtorno de identidad y no puede recordar información", dijo el abogado de Gimy.

El defensor, igualmente, colocó en audiencia un audio de la entrevista que entregó la mamá de María José a Jorge Cura, director de Atlántico en Noticias y Zona Cero, indicando que la versión que vincula el sobrino a su tío es mentira.  

"El muchacho Randy deja limpio al taxista Nelson y cómo él no va ver nada. Ese taxista vive en las piezas alquiladas que él tiene y es marido de la prima de Randy. Ellos salían a robar en ese taxi", se escuchó en el audio que colocó a reproducir el abogado y en donde habla la mamá de María José.

"Él incrima al tío porque este nunca ha estado de acuerdo con todo lo que hace él. Toda la culpa es de Randy y el taxista Nelson", dijo la mamá en el audio.

El abogado precisó también que a Randy, durante la audiencia realizada ante un juez de menores, confesó ser el autor material del crimen y dijo que "actuó solo". El adolescente fue internando en la correcional de menores.

Frente a esos materiales probatorios de la defensa, el fiscal aseguró que para valorar la salud mental del adolescente debe hacerlo un psiquiatra forense y no un psicólogo clínico. Además se debe hacer una valoración actual y no del 2016 como la que presentó la defensa del informe del ICBF.